Te contaba el otro día en redes sociales lo interesante que era el bimi, pero si te lo perdiste, te cuento por encima sus bondades (puedes leer más sobre el tema, junto a los estudios que avalan toda la info aquí .)
¿QUÉ ES EL BIMI?
- El bimi es un híbrido de la familia de las crucíferas que surgió por un cruce natural entre la col china y el brócoli.
- Su apariencia es como la del brócoli, solo que mas alargado y estilizado.
- Aquí en España fue presentado en 2014 por el chef Rodrigo de la Calle.
- En el resto de Europa se le conoce como «Broccolini».
- Posee un mayor contenido en fibra dietética, proteínas totales y minerales que el brócoli convencional.
- Contiene glucosinolatos, que tienen gran potencia anticancerígena.
- Contiene un tipo de Omega3: El ácido graso loinoléico.
Todo esto del bimi viene a que, yo quería comprar brócoli, y cuando se lo pedí a mi frutera, me dijo «pues te vas a comer un bimi(ento), porque brócoli no hay»…
Lo sé, es malísimo, pero tenía que soltarlo…
Ya me contasteis algunos que lo ideal era comerlo al vapor, escaldado o a la plancha con un poco de AOVE y sal, pero cuando el tonto coge el camino, se acaba el camino y sigue el tonto, y como yo me había levantado con ganas de una crema de brócoli, crema de bimi en este caso, ya no había quien me quitara la idea de la cabeza…
Pero, la verdad, ahora me alegro de mi cabezonería, porque, viendo lo que tenía en casa, me salió la crema de brócoli más deliciosa que he probado jamas. (Bueno, de bimi, pero ya me entiendes…)
El tema que te he dejado en la banda sonora de mi cocina es de un grupo que descubrí hace poco y que me encanta: Sallie Ford. La canción se llama «I swear» y es porque ¡¡te juro que esta crema esta para chuparse los dedos!!

- 525 g de bimi o brócoli
- 2 puerros
- 1 cebolla
- 1 dadito de jengibre (de 1 cm cuadrado aproximadamente)
- 5 hojas grandes de albahaca
- La ralladura de un limón grande
- 2 cucharas soperas de zumo de limón
- Sal y pimienta al gusto
- Se sofríen la cebolla y y el puerro picados, junto al jengibre laminado, a fuego lento hasta que estén trasparentes.
- Se añade el bimi lavado (habiendo desechado la parte dura del tronco) y se rehoga durante un par de minutos junto a la cebolla, los puerros y el jengibre.
- Se añade el agua y un poco de sal y se tapa la olla durante 15 minutos.
- Se bate todo junto a las hojas de albahaca y la ralladura y el zumo de limón con la batidora de mano.
- Salpimentar al gusto y servir junto a unas hojas de albahaca, semillas tostadas (de calabaza o cáñamo ) y unas gotas de aceite de oliva virgen extra.
¿Qué, como se te ha quedado el cuerpo?… Sea como sea, nada en comparación con como se te va a quedar cuando pruebes esta crema…Si tras el emplatado añades una cucharada de crema agria crudivegana , conseguirás un contraste delicioso.
Y recuerda…
Las recetas están para cambiarlas.
¡Nos leemos la semana que viene!
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